Hoy he recorrido el cerro de La Marañosa desde el que he disfrutado de algunas vistas, de la soledad de sus caminos en un día de diario, y de alguna trinchera y puesto en el que mi mente no para de imaginar.
Dejo unas fotos.
¿Que habrá pasado aqui, en esta Finca hasta con su Iglesia, y ahora plagada de botellas de dos litros de plástico de naranja y coca cola y demás basura procedentes de escondidas fiestas?
Ya por abajo del cerro, también el tantas veces escuchado "arroyo Culebro"
Y a lo largo de la senda, ya conocida, de vuelta al coche nuevos lugares en los recrear la imaginación.
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