lunes, 23 de diciembre de 2013

Continuo con la Sierra de Altomira



"El Gran Camino no tiene puerta, miles de senderos penetran en él; El que atraviesa esta barrera sin puerta camina libre entre el cielo y la tierra"








Ahí me encontraba yo en la mañana del domingo pasado, muy temprano, recorriendo una pequeñísima parte de la Ruta de la Lana, cubierto de un manto blanco de una intensa helada.








Y esa helada me habría creado algún problema con el guardabarros en su posición original, guardabarros que de origen viene demasiado pegado a la rueda.





No había barrizal, no había llovido, pero encontré lugares donde los neumáticos patinaban y había una fina capa de barro que se pegaba al neumático y cubrecarter.





El taco central de los Tk 80 en las ruedas de 19 es una gozada en las cuestas abajo con humedad: muerde.





Junto a las señales del Camino de Santiago, aparece la Cruz de Caravaca. Se trata de una ruta que comienza por el Madrid Rio, recorre el Parque del Manzanares y lleva hasta Uclés, a diez km de donde me dirijía. Otra ruta que recorrer entera, por partes, o sólo las zonas que me puedan interesar.





Al parecer, el paseo del Río Calvache es una de las riberas de la Alcarria conquense mejor conservada con árboles centenarios a lo largo del sendero.



En Barajas de Melo nació Fermin Caballero, Alcalde del pueblo y de Madrid, Notario del Rey, cuya Obra ha sido elogiada por la propiedad de su lenguaje,  que en 1834 publico la Nomenclatura Geográfica de España, fundó el Boletín de Comercio, periódico liberal exaltado del que fue redactor principal y que propuso un plan de Censo de Población





Tras una parada para tomar caldo (caldo, Luixfco, no te, Bravucon) y templar el cuerpo, cambiar guantes, quitarme el casco y relajarme, voy hacia el nacimiento del Río, a "Puerta Paredes", lugar del Búho Real ( la foto anterior dedicada a Manolo Medel, a quien le gustó fotografiar el pico del fondo, cuando fuimos juntos por la zona por vez primera),



Y continuo la ruta con la idea de subir a la Ermita de Saceda de la Sierra.



Este valle con esas laderas de piedra me recuerda a alguno del Pirineo en pequeño, claro




Me ha enganchado esta Sierra, pequeña pero no se que tiene; Poca gente, todo muy cuidado, no se.




Encontré la senda. Estrecha, juguetona, mas lenta que mi preferida en otra ruta, pero limpio de piedras y encajonado. Si todo es asi "chupao"





En el pueblo me dijeron que no era camino ni siquiera para las motos de campo, pero yo debía intentarlo






Sin embargo, tras avanzar un rato, tras un arbusto me encuentro una subida con escalón en todo el centro, y pendiente con piedra suelta por el lateral.





El escalón me parece el sitio por donde subir, pero, acompañado. Asi que me doy media vuelta que consigo con paciencia y los trucos aprendidos con Ziervo, Parra, Agus y Miguelon






Encuentro otro sendero muuuyy divertido que en el gps no aparece; Voy por ninguna parte según su pantalla, pero más adelante engancho con otro camino...





... que continuo hasta llegar a un tierra muy cuidada. Según el gps aquello sigue y sigue, aunque en mente tengo una idea de por dónde ando y, primero, recuerdo una carretera que sube al puerto y, segundo, que la zona por la carretera la vi vallada.



Lo dejo, me doy media vuelta, cojo otra pista y me quedo cerca de una población donde paro a disfrutar del solazo que hace, de su calor,de unas almendras saladas  y del resto de caldo que dejé en el termo. Me quedo un buen rato ahí. Las vistas, el día, la mañana pasada me llevan a quedarme un rato ahí.





Seguiré husmeando esta zona. Me ha enganchado.







miércoles, 11 de diciembre de 2013

Castillo de Bijuesca

Fue una fortaleza estratégicamente muy importante por su situación fronteriza con Castilla, situación por la que tuvo que ser fortificada en numerosas ocasiones; a su lado se encontraba la iglesia como parte de la defensa. Se tienen noticias de grandes obras realizadas por Pedro IV en 1357, cuando mandó despoblar el lugar y fortificar la iglesia y el castillo. A pesar de estas obras de fortificación, fue uno de los primeros castillos conquistados por Pedro I el Cruel en la invasión de 1358, dejándolo bajo la alcaidía de su fiel capitán Gómez de Carrillo, a quien mandó ejecutar poco más tarde bajo sospecha de traición.

Reconquistado por Aragón, se perdió nuevamente en 1362. Tras su recuperación por Pedro IV fue mandado derribar. Esta orden del rey sólo se cumplió en parte, gracias a lo cual aún se puede contemplar el interesante castillo.







Esta era la meta a alcanzar desde el pueblo por parte de madre. Sobre Google earth tracé la ruta y salió bien. No es muy larga, más bien corta pero sí es de disfrutarla por los valles que se recorren por caminos con bosque variado y llanuras desnudas por carriles mal asfaltados.












Las vistas desde las cercanías de Peñalcazar frente al Moncayo son espectaculares. Contrasta el azulón del cielo, con el monte seco pero el Moncayo nevado.










Pueblos castellanos, deshabitados, con sus casas de piedra.






Solitarios pero conservados por aquellos que nacieron en ellos, que a poquitos arreglan y reparan sus casas donde vivieron con sus padres; Y entre ellos, alguno levanta originales espacios











La ruta esta compuesta de una primera parte conocida, que discurre por un camino existente de siempre pero poco visible hoy por la falta de trasiego de las gentes de entonces con sus caballerias;





Una segunda parte muy llana, abierta, que discurre por un camino asfaltado, ...






y una tercera preciosa, por caminos, entre bosques con sensación de estar perdido que en cierto modo lo estas como se le ocurra a la moto pararse y no arrancar, ya que paisanos hay pocos y los pocos a saber cuándo volverán a pasar.








Un vadeo. 














Aguas abajo de Bijuesca encontramos la famosa fuente de 28 caños construida en piedra de sillería y de la que mana agua constantemente a 16º durante todo el año; ya en tiempos del imperio Romano el poeta bilbilitano Marcial alababa la pureza y propiedades de este agua. 


















A pocos metros un puente romano nos ofrece una bella estampa sobre el Manubles

















Aqui tiré del contenido de la mochila: bocadillo tras caldo de pollo en termo con lata de mejillones en escabeche.
Luego volví por las ultimas pistas parando en el estrecho que dejé para la vuelta y luego por esas carreteras por las que solo vi maquinaria agricola y ni un solo coche.








martes, 26 de noviembre de 2013

A mi aire


Maldito sábado pasado y frío vividos este fin de semana ya dejado atrás, bajo un cielo gris amenazante pero sin nieve. ¡Cómo me molesta que esté nublado y/o haga frío pero ni llueva ni nieve!
Sin embargo, el domingo fue todo lo contrario: Soleado y horas centrales con buena temperatura y sin viento. Son fechas para llover y espero que la lluvia no tarde, pero mientras....









¡Vaya ratos de aprovechar para jugar con la moto!










¡Para buscar el derrape y rodar por serpeantes caminos borrando las huellas de las bicis!










Esto fue el colmo; Tras darme la vuelta en una bajada pronunciada por la que continuaban los rastros de las bicis, me fui a buscar sendas o caminos anchos. Y mira tu por donde apareció esta silla junto con un colchón, una Telefunken Palcolor, y unos armarios. ¡Que sucia que es la gente! Se me ocurrió hacer la foto y parar a echar unos tragos de agua.










Estoy sorprendido del éxito de la foto e imagino cuántos habrá que piensen en la chorrada que hice. ¡Pero!

Este Rincón me priva:









y Allí anduve jugando con la cámara y paseándome para acá y para allá buscando ... ángulos









¡Qué bonitas las hojas caídas! Sumale la humedad del río y el sonido del agua y qué lástima que la foto no te guarde esto para ponerlo encima de la mesa del trabajo.









Si, me extendí rayando en la pesadez, pero he pasado muchas veces, y solo en una ocasión montado en el coche tiré cuatro fotos aunque era un día sin sol, no como ayer, con los reflejos en el agua.








Más agua al estomago y unos pistachos.









Esto ya fue el colmo. Me metí por el sendero por dejar guardada la imagen del río y el puente desde ese otro ángulo ¡ y lo que me costó darle la vuelta a la moto!









Pero lo pasé "teta". Que buen rato me ofreció Este Lugar. Me lo recuerda mi hombro derecho que a hoy martes lo tengo tocado de mover la moto.









En días así pienso en CRF 250 L o Beta 4.0. Ainss que me deparará el futuro. Me veo como Eduardo, amigo de Murcia que a sus sesenta y tantos no quiere vivir si no puede continuar montando en moto, quien por cierto, estará ya preparando su bajada a Africa de este año con su preparada WR 450.

La sonrisa es real; Reflejo del momento y de la tarde.









Me tenía que haber traído la silla aquella hasta aqui , juas juas juas.








Aunque igual no me habría movido.









Continué ruta buscando caminos nuevos o que no recordará, pues más tarde me di cuenta que algún tramo si lo había hecho anteriormente








Y aproveché algún lugar que me parecía curioso para tirar fotos en marcha














El sol caía en picado, y los colores se volvían más fuertes








Divertidísimo camino y curioso con la montaña tan pegada, y tan cercana la acequia. Iba yo pensando si el SX 4 pasa por ahí para ir con Enano en estos días fríos.









Y esta fue la que más costó. Ya andaba cansado. Tuve que poner el trípode un poco más abajo del primer intento. Me gusta esta panorámica.







Pongo las dos que más me gustaron de las que tiró la máquina.









El amigo Medel me comentó que esta foto le gustaba. Lo "peor" de todo es que no se veía nada avanzando por el camino. El sol cegaba completamente la visión y paré para tratar de hacer ver que no se  veía un carajo.








Con esta me he pasado tres pueblos pero... ¡es chula!








Y en esta zona comencé a notar que la temperatura bajaba por vuelta de rueda; Un lugar lleeeeno de caminos; ¡Un laberinto! Habrá que indagar por la zona.








Luces y sombras.








Parada, a recuperar el forro polar, braga y malla para las piernas ante la mirada de este perro la mar de cariñoso y de mirada dulce y triste. ¡Cuantos palos me temo que se habrá llevado!